Cristian Llorens: “No es solamente conectar con las personas, sino también conmigo mismo”. El escritor barcelonés muestra su lado más personal y anuncia el futuro estreno de un nuevo libro Cristian Llorens / Imagen cedida 01/05/2024 En el telar de esta entrevista, tejida con la puntualidad de quienes están comprometidos con su trabajo, periodista y escritor entran en videollamada. Es la mañana del primero de mayo, y, levantándose el sol de lo que podría parecer un domingo, ambos toman la mala costumbre de las profesiones ambiciosas: han vuelto a olvidar que los días festivos no se trabaja. Cristian Llorens (Barcelona, 1994) es, para muchos y muchas, un escritor vitamina. Con cinco libros a su espalda y una gran familia de lectoras, escribe textos y frases a la vez que invita a la valentía, el amor propio y el empoderamiento. Cristian Llorens / Imagen cedida Conocemos a Cristian el escritor de frases, prosa, libros de textos y poesía, pero como persona todos tenemos un más allá: ¿Quién es Cristian Llorens? Ante todo me considero una buena persona, un tipo divertido que siempre intenta pasarlo bien con sus amigos y familia. Alguien muy familiar, me siento muy unido a ella. Hace un año y medio tuve un hijo con mi mujer y es lo mejor que me ha pasado nunca. También soy una persona muy sensible y creo que eso se refleja en mis escritos. ¿Estudiaste literatura o algo relacionado con este campo? Estudié un grado superior de Administración y Dirección de Empresas, pero fue un año transitorio para estudiar la carrera de Relaciones Laborales en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. De hecho me dedico a esto: trabajo en el departamento de recursos humanos de una empresa de logística. Tengo suerte de poder trabajar de lo que estudié. Entiendo entonces que no vives de la escritura… No, y aunque pudiese vivir, lo veo como algo que me ayuda a estar bien. No es solamente el provecho económico, sino también el componente emocional que tiene. ¿Cuándo descubriste que lo tuyo era la escritura y que querías tomártelo como algo más profesional? Cuando terminé la carrera, en el trayecto de tren de Sant Pol de Mar, que es donde vivo, hasta Barcelona. Siempre aprovechaba esos momentos para escribir en notas del teléfono, aunque desde pequeño ya escribía. Mi familia siempre me decía que estaba muy bien lo que hacía y que me plantease publicar mis escritos. Pero… ¡Me moría de vergüenza! Te sientes muy vulnerable al publicar algo que tú estás sintiendo, aunque acabé haciéndolo en Instagram. La gente conectó un montón conmigo, y ahora la verdad que diariamente recibo mensajes de personas que se sienten identificadas con mis letras, y es lo más gratificante que hay en el escribir. Es lo que me motiva. Puedo estar muchas horas escribiendo que se me pasa el tiempo volando, y si encima ayudo a alguien con ello pues es un plus. Además, a día de hoy eres reconocido en las redes sociales, donde sumas casi 350.000 seguidores, ¿cómo afrontas este gran impacto que estás consiguiendo a través de un mundo tan complejo como es la escritura? Es bastante heavy pensar que tanta gente está pendiente de tus publicaciones. Me escriben mensajes como “oye este texto me ha mejorado el día” y eso es muy emocionante. Cuando he ido a alguna feria del libro y he tenido contacto con esas personas, el choque se multiplica por diez. Detrás de la pantalla no sientes ese calor emocional, no es lo mismo. Al principio cuando empecé a crecer me impactó, pero ahora lo he convertido en algo normal y me reconforta saber que sigo siendo la misma persona que cuando tenía 300 seguidores. A mí lo que me gusta es escribir, publicarlo para que la gente lo lea y que pueda sentir un apoyo en mis escritos. En alguna ocasión he visto que esto te ha podido generar problemas como el plagio de tu contenido, ¿cómo acostumbras a encarar este tipo de situaciones? Tiene dos vertientes: primero piensas que si alguien te está intentando copiar es porque lo que haces gusta e intentan hacer lo mismo. Yo siempre he pensado, y esto lo he dicho en Instagram, que si tú coges un escrito mío y eso te inspira a escribir sobre ese tema, está perfecto, podrás ayudar a muchísima gente. Otra cosa es que cojas mi texto, le quites mi nombre y pongas el tuyo, algo que también le ocurre a muchísimos escritores. Yo la verdad que no me entero de estas cosas, me informan de ello mis seguidores. ¿Nunca te has planteado denunciarlo de alguna forma más seria? No gano nada, y aunque lo tengo todo registrado, sería perder el tiempo. A veces lo denuncio públicamente en redes. Aun así, días antes siempre contacto con la persona que me ha plagiado, y le digo que por favor borre el contenido o que en todo caso reconozca mi autoría. Intento hacer siempre el paso previo de no exponer a alguien porque sé que puede tener cierto impacto y esa persona puede recibir comentarios negativos. No es lo que quiero fomentar, aunque me he encontrado de todo: faltas de respeto, que se excusen o la mayoría de veces me dicen que lo han visto en una cuenta de frases y que entonces lo cogieron. Tu contenido literario, principalmente, es un elogio hacia la mujer, hacia la fuerza, la valentía, ¿hay alguna historia previa que te llevase a tomar este camino? Es algo que me nace, debe ser por el amor que siento por las mujeres que he tenido en mi vida: mi madre, mi mujer… Principalmente porque escribo desde la vertiente del amor, y también por un tema de datos: si el 97% de las personas que consumen mi contenido son mujeres, veo en ello una manera de que puedan conectar mejor con mis textos. Gusta cuando lees algo y te sientes identificada leyéndolo como si lo hubieras escrito tú. Creo que esa es la…